Exposición del periodista Gervasio Sánchez en Zaragoza en tenzaragoza.es
- El fotoperiodista Gervasio Sánchez recorre 25 años de conflictos bélicos a través de más de 130 fotografías y 50 retratos
- Después de muchos años en la brecha se muestra algo pesimista: “El problema es saber si lo que se hace en los medios ahora es periodismo”
Gervasio Sánchez ha recorrido el mundo entero y ha sido testigo de algunas de las mayores atrocidades de la humanidad ocurridas en el último cuarto de siglo. Ahora, una buena parte de esas obras, pasan a formar parte de la exposición ‘Antología’, que estará disponible en el Instituto Aragonés de Arte y Cultura Contemporánea Pablo Serranohasta el 22 de febrero.
La muestra, formada por fotografías tomadas entre 1984 y 2009, se compone de 132 imágenes organizadas de manera cronológica y 48 retratos de personas, víctimas directa o indirectamente de los conflictos armados.
– ¿Qué se siente al ver 25 años de su obra expuesta?
– Es pura emoción, y sobre todo es sentir que he tenido la suerte de no estar aquí -señalando a la lista de compañeros españoles que han perdido la vida en zonas de conflicto, a los que ha dedicado esta antología-. Tengo muy claro que tengo la suerte de no estar en esa lista y de poder contarlo. Siento un gran dolor sobre todo por el pesimismo con el que veo a la sociedad de hoy en día. La guerra me ha permitido conocer hasta donde puede ser salvaje el ser humano y te das cuenta de que es muy difícil que podamos vivir sin conflictos armados.
– En varias ocasiones ha criticado el silenciamiento de los medios de comunicación en lo referente a este tipo de informaciones. ¿Cuál es la situación actual?
– Hay muchos conflictos que comienzan siendo muy mediáticos pero que caen en el ostracismo mediático, por ejemplo Afganistán, que sigue teniendo problemas irresolubles como hace cincos años,o África, el continente perdido y olvidado. El problema es saber si lo que se hace en los medios ahora es periodismo. Patentar intereses que no tienen nada que ver con el periodismo y relacionarnos como amigos del poder hace plantearse muchas cosas. Creo que es muy importante que los ciudadanos sepan lo que ocurre en estos países y lo puedan ver de primera mano.
– Pero, también es importante que conozcan lo que pasa a nivel local, en sus barrios.
– Está claro que no hace falta marcharte a la otra parte del mundo para documentar situaciones duras. Ahora porque estamos en crisis, hace 20 años sin estarlo… Hay historias que hay que documentar pero realmente no se hace y parece un intento de tapar los problemas graves producidos por la propia sociedad. Si yo estuviera al frente de un medio de comunicación tendría periodistas comodín que me sirvieran para enviarlos a hacer historias buenas en tres días, no con la inmediatez que se exige ahora.
– Parece que existe una creencia generalizada de que el periodismo hiperlocal es menos importante que el que atañe a grandes conflictos internacionales.
– Yo siempre he trabajado en el extranjero, pero muchas veces he repetido el mismo viaje en varias ocasiones para poder aprovecharlo y sacar algo en claro, incluso hoy, aunque ahora viajo más preparado, me llevo mi carpeta con historias para no llegar al lugar y no tener ni idea. Hay que entender que por ir a la India a hacer un reportaje no vamos a comprender lo que ocurre allí. Si no eres capaz de entender lo que pasa a tu lado o eres incapaz de encontrar buenas historias en casa… ahí están las claves. Mónica Bernabé, con la que acabo de hacer el proyecto ‘Mujeres de Afganistán’, asegura que aprendió haciendo periodismo local en los barrios de Barcelona. Hacer buen periodismo es igual de difícil al lado de tu casa que en el quinto pino.
– ¿Cómo se financian este tipo de proyectos?
El periodismo para mí dura 24 horas al día. Cuando sueño, cuando duermo, cuando me ducho… soy periodista. Es un oficio. Cuando iba a Sarajevo, al tiempo escribía para Heraldo de Aragón, al tiempo que trabajaba para Cadena Ser, historias que me permitían financiar mi viaje. Me levantaba el primero y me acostaba el último y me pegaba jornadas maratonianas. Muchas de las imágenes aquí expuestas aparecen porque en vez de estar tres días me pegaba tres semanas.
Debe estar conectado para enviar un comentario.